sábado, 7 de abril de 2018

LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS TAMBIÉN SE ENAMORAN






                                             



                                                               Día de San Valentín

                                  LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS TAMBIÉN SE ENAMORAN

                                                            
Muchos adultos se angustian
cuando sus hijos pequeños
hablan de noviazgo; lo mejor es
es escucharlos y comprenderlos


MIREYA TABUAS

   "Tengo un novio y me dio un beso", cuenta Lya de 9 años de edad. "Estás muy pequeña
los niños no se enamoran", es la respuesta del padre que ve en esa confesión una tragedia.
Pero no es así: niños y niñas desde sus primeros años, experimentan  distintas  formas  de
enamoramiento.

   La psicóloga infantil Keila Graterol explicó que en la primera infancia se presenta el amor edípico: la niña que se cree novia de su papá, o el niño que dice que se casará con su mamá. "Eso va cediendo, entran a un período de latencia y pasan al elemento fantasioso , platónico, por las maestras, los cantantes y otras figuras inalcanzables".

    A los 9 o 10 años tienen un interés concreto por un niño o niña de carne y hueso. Pueden ser amores pasajeros. Graterol dice que  esos  enamoramientos son  importantes  para   el desarrollo: "Son ensayos de acercamiento al sexo opuesto".

   Recomiendo a los padres no entorpecer esa vivencia y no poner trabas, permitir a los niños que hablen de eso, oírlos para que no empiecen a esconderles cosas. Cree que es una ocasión para corregir actitudes machistas y sexistas.

Fuente: Diario "El Nacional",
Sábado 9 de Febrero de 2008.


NOTA:  En este tipo de amor, la fantasía y la inocencia se conjugan. Es una etapa de emoción vivencial muy breve, donde lo perdurable es el enfoque de un recuerdo hermoso que deja la niñez.
Este artículo, pleno de enseñanza para padres y abuelos, me hizo evocar a mi prima Nancy Escalona Osal, a sus seis añitos, cuando se le preguntaba quién era su novio, contestaba con firmeza y en voz alta : "¡MI PAPAYO!", de hecho, lo celaba de todas las mujeres, excepto de su mamá.